miércoles, 31 de julio de 2013

Night of the Prog Festival - Loreley (2013)


Els quatre primers concerts (Pineapple Thief inclosos)
em van sonar a más de lo mismo todo el rato, tret d’algunes pinzellades del
grup del fill del Phil Collins (que canta igual igual que ell però desafina
com una bestia). La cosa va canviar radicalment quan van sortir Magma, que
van tocar un tema del seu proper disc (brutal per cert) i després es van
cascar el Felicite Tosz (o com s’escrigui) i el MDK sencers, i després el
Wilson (que va preguntar a l’audiència si ens havia agradat Magma i va dir
que era una de les seves bandes favorites) lògicament ho va petar tot, el
concert va ser acollonant. En Chad Wackerman, qui suplia al Minnemann, va
fer la feina perfectíssimament (lògic, és un dels bateries top). Tot plegat
per sortir amb danys cerebrals, vaja ;-)

El lloc, l’amfiteatre de Lorelei, un “marco incomparable” com se sol dir,
però una mica incòmode per el calor que va fer mentre el sol era present,
tot i que està ben acondicionat en quant a avituallaments i la gent en
general es comporta i roman asseguda (tret del Wilson, que tothom vam veure
de peus… per cert era ple, no sé si van fer sold-out però allò era a petar).
Una de les coses més curioses va ser veure la varietat de samarretes que
portava la penya, dels grups prog més insospitats (fins i tot vaig veure una
de Guapo…)

Del dia següent (Anglagard, Amplifier, Devin Townshend i Opeth entre
d’altres) en tot cas us diran alguna cosa el Pepe i/o en Joan, crec que va
estar molt bé en general però no es va superar el binomi Magma+Wilson.

by Javi
 -------------------------------------------------------------------------------------
Día 1: buenos instrumentistas
pero en lo que a la música se refiere, para mi gusto, poca chicha ,
Pinneapple incluidos (quizás me había generado demasiadas expectativas)
y muy muy poca variedad sonora, hasta que vino "lo otro" (Magma+ Steven
Wilson). Pero las cosas como son, el Sábado con los primeros grupos,
sobre todo con Cripped Black Phoenix, la gente estaba entregadísima, por
lo que entiendo que la organización intentó contentar a la concurrencia.
Comentar que las proyecciones durante el concierto de Steven Wilson,
para mi gusto, están MUY bien, con bastante mal rollo en momentos
puntuales.

De la organización nada que añadir, y con la salvedad de la
gente que se levantaba (y no dejaba ver a los de atrás), por lo general
buen comportamiento del respetable incluso entre los que habían bebido
bastante... Media de edad alta, lo digo por el contraste, por ejemplo
que tengo la sensación de haber visto en el concierto de Wilson en
ROma-Ciampino. Se acabaron las camisetas de Steven Wilson y Anglagard
(para alguien que traía camisetas que no eran negras, con lo que duele
eso en Sevilla en esta época del año...)

El segundo día, por aquello
de evitar las horas gordas de sol (los conciertos empezaban a las doce
del mediodía y esta vez no había apenas nubes) y por hacer un poco de
turismo, llegamos cuando Maybeshewill había acabado. Hubiera estado bien
tenerlos el día anterior, para variar un poco de registro en la primera
mitad del Sábado. Llegando nosotros estaba haciendo las pruebas finales
de sonido Anglagard. Abrieron con una improvisación bastante curiosa (y
potente; qué bien suena ese bajo, releñe) y el resto fue un poco
sorprendente porque tocaron sólo un par de temas de Viljans Öga, dos de
Hybris y Jordrok del Epilog. Nada, que la palmaré sin ver los primeros
cinco minutos de Skogsranden en directo. Por cierto, NO se trajeron el
mellotron (o al menos, un mellotron) como hicieron en Gouveia.


Amplifier estuvieron bien; de hecho muy bien ya que fueron de menos a
más; que entiendo empezaron tocando mucho del último, que estuvo bien
pero terminaron tirando bastante más del Octopus, que es un disco que me
gusta bastante. Al igual que Anglagard, sonaron de cine, e incluso
cuando uno se alejaba un poco del frente del escenario, mejor.

La búsqueda de una cena que no fuera carne con guarnición de carne hizo que
nos perdiéramos a Caravan, aunque se escucharon perfectamente fragmentos
del Nine feet underground mientras regresábamos. Entiendo no obstante
que sólo la empezaron. En cualquier caso, Caravan en directo en Gouveia
me pareció un truño porque los nuevos temas me parecen más huecos que la
cabeza de un ministro, y en el RIO lo mismo aunque se les vio más
conjuntados (y tocaron NFU, ehem).

Y de postre, tralla.

Salió Devin Towsend Project, un grupo que sólo conocía de óidas. Para empezar, les
faltaba un señor de barba larga (un guitarrista) que fue sustituido...
por su imagen en cartón, tamaño natural. El sonido, donde yo estuve,
porque me moví, fue horrendo (el bajo no lo escuché). Pero en fin,
echaron ganas, entusiasmo y estuvieron poco más de una hora de lo que
entiendo que NO es metal, en absoluto, sino hardcore con algunos tintes
progresivos. Ahora que lo estoy escuchando, reconozco cosas del Zoltoid
the Omniniscient (gracias por la sugerencia, Joan!) Lo cierto es que
sonido aparte, me gustaron y me dejaron con ganas de escuchar más de
esta gente. El Sr Towsend bajó varias veces del escenario para tocar
dejando que las primeras filas le acariciaran la cocorota, creando el
pánico entre los dos o tres de seguridad... Al terminar tuvo el detalle
de bajar y conversar con la gente que estaba a pie de escenario, se hizo
fotos, departió con ellos saludando a todo el mundo durante casi 20
min... En fin, no es una prima donna.

Y terminó Opeth, que no recuerdo
si es la tercera o la cuarta vez que los veo. Ignoro si tenían previsto
el setlist que tocó o no querían provocar una bajona después de lo de
DTP, pero tocaron sólo un par de temas de Heritage, recurriendo al Ghost
reveries, Damnation, Deliverance... y no recuerdo si Blackwater Park. De
hecho decía el Akerfeldt entre guasa y guasa (como de costumbre) que en
poco tiempo tenían que tocar en un festival llamado Brutal Assault, que
no estaba seguro de que hubiera allí muchos aficionados al prog-rock. Y
que de hecho ya no tenía claro lo que era rock progresivo (no sé si os
suena), pero que había disfrutado mucho con Magma (llevaba camiseta de
este grupo), Caravan y "my buddy Mistress Wilson". Sonido mejorable,
setlist tirando a leñero, lleno cuasiabsoluto, otra vez, y por lo
general ha sido de las veces que más me ha gustado en directo.

Y la gente de pie, grrrrkjhfaksjhfkjhf.

EN fin, 2º día de notable, pero es
que el primero fue de sobre (por el final, en mi caso). Si la lista de
participantes lo permite, habrá que volver. Pero con más tiempo para
pegarse algún pateo por los alrededores, que es zona de senderos y
paisajes espectaculares junto al Rin, y con una crema solar factor 50 o
una chilaba, según me coja el día.


La camiseta del festival, la que
llevaba un señor enorme, barbudo y con melena: "Fat people: the hardest
to kidnap". Las carcajadas de Javi y un servidor se escucharon en
portugalete.

--
JL Mas

jajaja cierto. Pero me permito una rectificación, Pepe, si no me falla la
memoria, en la camiseta ponía “Fat people are harder to kidnap”. (“Los
gordos son más difíciles de secuestrar”, para quien no lo pille).

No hay comentarios:

Publicar un comentario